Artesanía Comca’ac, regalo cultural de los Seris al mundo
En portada: “Corita” tejida con varas de torote. Foto: MC Martín Bustillo Ruíz
Elaborada con materiales naturales de la región, la artesanía Comca’ac ya es apreciada por su belleza en varios países, pero se requieren acciones para su comercialización formal
Por: M.C. Martín Bustillo Ruiz
En los poblados indígenas Comca’ac de Punta Chueca y Desemboque de los Seris ubicados en el noreste de México, los habitantes fabrican artesanías muy bellas.
Actualmente a los Comca’ac (también conocidos como Seris) se les reconoce por su trabajo con el tronco del árbol de Palo Fierro (Olneya tesota). Una especie endémica del desierto sonorense y considerada exótica por sus características.
Hace más de 50 años aprendieron a usar el palo fierro en la fabricación de figuras que semejan o remedan la naturaleza que los rodea.
A diferencia de los artesanos de Bahía de Kino y Hermosillo, quienes cuentan con un sinnúmero de equipos y herramienta especializada que hace lucir las figuras muy estilizadas, los Comca’ac solo emplean un hacha y un mínimo de herramienta, puliéndolas con lija y pintándolas con grasa de bolear calzado. Lucen definitivamente más rústicas, pero no menos bellas.
Sin embargo, dichas artesanías les han permitido viajar por el mundo, donde se les ha invitado a exhibirlas por su alto valor cultural y económico para quienes sabemos apreciar la artesanía Comca’ac.
No solo son figuras de palo fierro, sino también “platos” y canastas llamadas “coritas”. Estas son elaboradas con el arbusto conocido como torote, y pintadas con tintas naturales obtenidas de raíces de otros arbustos locales de donde ellos mismos lo extraen, como el “cósahui” (Krameria grayi).
Las varas del torote son procesadas y reblandecidas con agua para ser entretejidas formando los canastos manualmente. Terminar una corita, dependiendo de su tamaño puede llevar desde dos semanas hasta dos años. La canasta más grande se premia durante el año nuevo Comca’ac a celebrarse el 30 de junio de cada año. A esta se le llama “Saaptim” y la fiesta de la “Canasta Grande” dura varios días para que propios y extraños puedan admirarla. Las coritas son probablemente el artículo de mayor valor comercial.
Adicionalmente, las mujeres Comca’ac crean infinidad de aretes y collares diversos muy hermosos, la mayoría de los cuales utilizan caracolas marinas o piedras que ellas mismas recogen en las regiones de su propio territorio.
También crean pulseras de los mismos materiales, así también vestimenta típica hecha y bordada a mano con motivos tradicionales.
Igualmente elaboran figuras animales con piedras pulidas de la región. Son famosas también sus bolsitas para colgar del pecho con salvia al interior, al igual que los atados de la misma planta a la cual se atribuyen propiedades medicinales como espirituales al traer buena suerte.
Los varones, además de las figuras de “palo fierro” (donde por cierto también intervienen mujeres) elaboran figuras con coral negro que es muy escaso y costoso, fabricando magníficas hebillas vaqueras y figuras de animales.
Comercialización, tarea pendiente
Los antropólogos norteamericanos, quienes a lo largo de varias décadas los han estudiado, entre ellos William Neil Smith apodado “Seri Bill”, tal como dejó asentado David Burkhalter en su libro “William Neil Smith y los indios Seris” en 2013, también han servido de conducto para colocar muchas de estas artesanías en salas de museos del sur de Arizona y California y una parte para ser comercializada al público.
A ese respecto, a la fecha no se han establecido las cadenas de comercialización necesarias para garantizar un ingreso continuo a la mayoría de las artesanas. Estas dependen de las ventas al menudeo a los visitantes de fin de semana.
Aunque también tienen la opción de entregarlo a un acopiador de artesanía de la misma etnia quien ya tiene establecida la comercialización, pero paga menos por volumen, resultando en una utilidad muy marginal, a decir de las mismas artesanas.
Cabe destacar el caso de algunos artesanos Comca’ac, como Valentina Torres en Desemboque de los Seris, que han aprendido a utilizar las redes sociales para promocionar sus productos los cuales se pueden apreciar en su página de Facebook: www.facebook.com/Comcaac-Artesan%C3%ADas-Torres-820200221494650
Es una tarea pendiente el establecer los medios para su comercialización al extranjero de dichas artesanías, misma que fomente la elaboración de las mismas como un trabajo permanente y bien pagado. No solo a los Estados Unidos de América, sino también a la Unión Europea y Reino Unido donde también son muy apreciadas.
No son muchas las opciones de trabajo e ingresos que tienen las mujeres Comca’ac. Estas no salen de sus poblados donde viven mayormente y conservan sus tradiciones.
Tampoco se han establecido plantas de proceso y valor agregado para los productos pesqueros donde aumente su valor en los mercados, y donde tradicionalmente el género femenino tiene una mayor participación.
Agradecimiento
La sesión de fotografía es de un servidor, y debo agradecer al numeroso grupo de la indígena Luz María López Palma y su familia permitirme hacerlo con el fin de promocionarlas a través de la siguiente página de Facebook www.facebook.com/ComcaacArte.