Los sonidos de la naturaleza benefician nuestra salud física y mental, explica la ciencia
Salir a la calle y respirar un poco de aire fresco puede ser bueno para nuestro bienestar, pero no solo eso, prestar atención y escuchar los sonidos de la naturaleza también puede ser bueno para sanar nuestro cuerpo.
Esto fue descubierto recientemente gracias a una investigación realizada por el departamento de biología de la Universidad de Carleton en Canadá. Los investigadores estudiaron los efectos de los sonidos naturales, incluyendo cantos de pajaros y el correr del agua en los ríos, para determinar su efecto tanto en la mente humana como en el dolor. El equipo descubrió que los sonidos de la naturaleza pueden tener un efecto positivo en ambos.
Rachel Buxton, investigadora del estudio, detalló que los sonidos son buenos para generar sentimientos de tranquilidad.
“Son buenos para aliviar el estrés y una amplia variedad de beneficios que descubrimos, desde aliviar el dolor hasta mejorar el estado de ánimo y la capacidad cognitiva”, dijo a U.S. News and World Report.
En cuanto a qué tipo de sonidos responden mejor las personas, los investigadores encontraron que los paisajes sonoros que incluían aves tenían el mayor efecto en cuanto a la reducción de estrés y sentimientos de irritación o exasperación.
Por otra parte, revelaron que los sonidos relacionados con el agua, como ríos, mares y lluvia, tenían un mayor impacto en fomentar emociones positivas y problemas de salud física.
Entonces, ¿deberíamos salir a caminar a nuestro parque más cercano? Al respecto, al analizar el audio grabado en 221 sitios de 68 parques nacionales, los investigadores encontraron que los ruidos humanos, como cláxones y bocinas, se encontraron en altos niveles en casi todos los sitios naturales.
Sin embargo, esto no significa que no debamos visitar espacios naturales, sino dedicar tiempo a protegerlos.
“La pandemia ha enfatizado la importancia de la naturaleza para nuestra salud. A medida que el tráfico disminuyó durante la cuarentena, muchas personas se conectaron con el entorno acústico de una manera completamente nueva: notaron los relajantes sonidos de los pájaros cantando afuera de su ventana”, dijo Buxton a Treehugger.
“La próxima vez que visites tu parque favorito, cierra los ojos y escucha todos los sonidos: el canto de los pájaros, las hojas de los árboles. Estos sonidos son hermosos e inspiradores, y resulta que también son buenos para nuestra salud. Estos bellos sonidos y espacios a los que podemos acudir para escucharlos merecen nuestra protección”, añadió.
Consulta la investigación completa aquí: www.pnas.org/content/118/14/e2013097118
Con información de Travel and Leisure y Treehugger.