
Maculís, el árbol de follaje rosado que adorna las calles del sur de México
Caminar entre árboles de follaje rosa no es una experiencia única de Japón. En México también tenemos nuestra versión del sakura oriental.
Se trata del Maculís (Tabebuia rosea), un árbol rosado nativo de México, así como también de otros países de América Latina como Guatemala, Salvador, Colombia, Venezuela y Perú.

El árbol pertenece a la familia de las bignonáceas, lo que significa que ‘son parientes’ de las igualmente hermosas jacarandas.

El maculís recibe distintos nombres dependiendo de la región donde crezca. Por ejemplo, en México también se le conoce como palo de rosa y amapa rosa. En Colombia se llama guayacán rosado, flormorado, roble rosado, etc. En Honduras es Macuelizo y en Guatemala se le llama matilisguate.
Este bello árbol puede llegar a tener una altura de entre 6 y 10 metros, aunque en condiciones óptimas puede alcanzar los 25 metros. Dichas condiciones son encontrarse en una región cuya temperatura ronde entre los 20° a 27° C y donde se registren precipitaciones promedio de 1500 mm.

En nuestro país, el maculís encuentra su hogar ideal en los estados de Veracruz, Puebla, Tamaulipas, Tabasco, Chiapas y la península de Yucatán, donde adorna con elegancia las calles y rincones de sus ciudades.

Además de ser un árbol ornamental por su gran belleza y armonioso color, la madera del maculís es de gran calidad, por lo que se utiliza en la fabricación de muebles, pisos y artesanías.
Y no solo eso, también tiene importantes propiedades medicinales. Químicamente, este árbol es rico en naftoquinoa, que a su vez se vincula con la vitamina K y que está siendo estudiado como antídoto para el cáncer. Se dice que el té de las hojas alivia la fiebre, mientras que la corteza cocida ayuda a sanar el paludismo, controlar la diabetes, la tifoidea y matar los parásitos.
Con información de México Desconocido