Vivir una vida de gratitud nos hace sentir más felices y plenos
Dos minutos… tan solo con realizar un sencillo ejercicio de dos minutos podrás sentirte más pleno, feliz y ¡vivo(a)! ¿Cómo es posible? Simple: cierra los ojos, colócate en una posición cómoda y piensa en todo aquello y aquellos por los que estás agradecido.
No hay reglas, puedes ir desde lo más amplio, como estar agradecido por vivir, por tener salud, por tu familia y seres queridos, hasta cosas del día a día como agradecer haber superado un problema o haber tomado una decisión en tu trabajo que traerá grandes frutos.
Puede que no logres hacerlo todos los días, pero cuando lo hagas, notarás que te sentirás mucho más feliz y, principalmente, más tranquilo. ¿Sabías que puedes realizar este ejercicio para controlar el estrés o la ansiedad? ¡Solo inténtalo y notarás la diferencia!
Pero, ¿por qué sucede eso? ¿Por qué el simple hecho de pensar en quién y en qué agradeces hace una gran diferencia en tu vida?
Estas son solo algunas razones:
- Porque te recuerda las cosas positivas de la vida: Te hace sentir feliz con quienes te rodean, ya sean seres queridos o simplemente un extraño que conociste y que fue amable contigo de alguna manera.
- Porque convierte las cosas malas en buenas: ¿Tienes problemas en el trabajo? Agradece que tienes un empleo. Agradece que tienes desafíos y no una vida aburrida. Agradece que puedes aprender de dichos desafíos. Agradece que estos te convertirán en una persona más fuerte.
- Porque te recuerda lo que es importante: Es difícil quejarse de las cosas pequeñas cuando das las gracias de que tanto tú como tus seres amados están contigo, ya sea en vida o en el cielo. Es difícil estresarse por tener que pagar tus deudas cuando estás agradecido por tener un techo sobre tu cabeza.
- Porque la felicidad de los demás también puede hacerte feliz: El simple hecho de darle las gracias a alguien puede marcar una gran diferencia en la vida de esa persona. Llamarlos, enviarles un correo o mensaje de texto… simplemente con tomarte un minuto para decires por qué estás agradecido con ellos es importante para sus vidas. A las personas les gusta que las aprecien por lo que son y lo que hacen. Esto los hace felices, y esto también te hará feliz a ti.
¿Cómo vivir una vida de gratitud?
Hacer simples actos de gratitud no nos cuesta mucho, pero pueden marcar una gran diferencia en nuestras vidas. Si deseas vivir una vida de gratitud, estas son algunas sugerencias:
• Gratitud matutina: Tómate 2 o 3 minutos cada mañana para dar las gracias a quien sea o lo que sea por lo que estás agradecido. No tienes que hacer nada más que cerrar los ojos y dar las gracias en silencio.
• Da las gracias: Cuando alguien haga algo amable por ti, di ‘gracias’. Por más pequeño que sea, recuerda agradecerle.
• Llama para agradecer: Cuando agradeces, es más probable que recuerdes algunos actos de bondad que las personas han tenido contigo. Cuando lo hagas, levanta el teléfono y llama o contacta a la persona para darle las gracias.
• También agradece las cosas ‘negativas’ de tu vida: Siempre hay dos formas de ver las cosas. Muchas veces consideramos las cosas como “negativas”, es decir, estresantes, dañinas, tristes o desafortunadas. Pero esto mismo puede verse desde una perspectiva más positiva. Dar las gracias por esas cosas es una excelente manera de recordarte que hay algo bueno en casi todo. Los problemas pueden verse como oportunidades para crecer.
Vía Zen Habits por Leo Babuta, autor y fundador del sitio www.zenhabits.net