5 frutas y verduras que México aportó al mundo (y que quizás no lo sabías)
Desde tiempos ancestrales, México cuenta con un suelo fértil y rico donde nacen toda clase de plantas. Además, la diversidad de climas ayuda a que crezcan una gran variedad de cultivos, desde las regiones más cálidas hasta las selvas y bosques. Por este motivo, no es de extrañarse que muchos de los alimentos que se consumen hoy en día tengan su origen en nuestro país.
Por ejemplo, existen frutas y verduras oriundas de nuestra tierra y que forman parte tanto de la maravillosa gastronomía mexicana como en muchos platillos internacionales. ¿Alguna vez te has preguntado qué ingredientes de tu platillo son de tradición mexicana?
A continuación te presentamos algunas frutas y verduras que son originarias de México. ¡Sorpréndete!
Aguacate (Persea americana)
El aguacate es una fruta (de la familia de las bayas) muy popular en todo el mundo gracias al famoso guacamole mexicano. De hecho, nuestro país es el principal exportador de aguacate en el mundo, y Estados Unidos es el mayor consumidor de nuestra cosecha de exportación.
Sobre su origen, existe evidencia que muestra que el aguacate era consumido en Mesoamérica desde hace 10,000 años, específicamente en Coaxcatlán, Puebla. Se cree que cuando los Españoles conquistaron nuestro país, le llamaron al aguacate ‘Pera de las Américas’ por su peculiar forma.
Guayaba (Psidium guajaba)
De sabor suave y característico, esta fruta está presente en una variedad de postres tradicionales mexicanos, desde ate, mermeladas, ponche y atoles. Se cree que esta fruta tuvo su origen en las regiones del sur de México, donde se extendió por Centroamérica.
Las variedades de guayaba se clasifican de acuerdo con su tamaño, forma y color de su pulpa, mismo que puede ser blanco, amarillo, rosa o rojo.
Además de su rico sabor, las guayabas (y sus hojas) son muy conocidas en la herbolaria tradicional por sus grandes beneficios a la salud, donde destaca su aporte al sistema digestivo, regula la presión arterial y el ritmo cardíaco.
Papaya (Carica papaya)
Esta deliciosa fruta tropical también es originaria de México, donde su árbol requiere de un clima cálido, húmedo y con mucho sol para crecer. Su cultivo se ha extendido a otras regiones del mundo, como el Caribe, Sudamérica, Asia y África.
Por sus propiedades nutricionales y medicinales, al árbol de papaya se le conoce como ‘árbol de la buena salud’. Su fruto ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, contiene vitamina A y antioxidantes, ayuda al sistema digestivo y es una excelente alternativa dulce para personas que padecen de diabetes.
Tomate (Solanum lycopersicum)
El tomate es una de las frutas más populares del mundo, principalmente en la cocina mediterránea, y México fue el principal centro de domesticación y distribución. Su nombre proviene de la palabra nahuatl xitomatl.
Se cree que los primeros tomates llegaron a Europa en 1540, específicamente al puerto de Sevilla, España, que era uno de los principales centros de comercio internacional. Estos tomates no eran del característico color rojo que poseen ahora, sino amarillos. Quizás esto explique su nombre en italiano: pomodoro (pomo d’oro o manzana dorada).
Jícama (Pachyrhizus erosus)
Esta planta leguminosa (que es sabrosa cruda con limón, sal y un poco de chile en polvo) es originaria de México. Su nombre proviene del nahuatl xicamatl que significa “raíz” o “raíz acuosa”.
La jícama es muy popular en la cocina oriental. Esto se debe a que, después de la Conquista, los españoles llevaron la planta a Filipinas, donde terminó extendiéndose a muchas otras partes de Asia.
La jícama es rica en potasio, calcio, hierro, fósforo y vitamina C. Además, por su composición de 85% agua, es un excelente hidratante. Su sabor dulce proviene de la inulina oligofructosa, un tipo de carbohidrato que no es metabolizado por los seres humanos, por lo que es una gran opción para personas que necesiten regular su consumo de azúcar.