
Las personas con amistades sólidas tienen una mejor salud cerebral, afirman estudios
Ya sea que tengas un gran número de amigos o un pequeño círculo cercano, la amistad tiene un poderoso efecto en nuestra salud cerebral.
Existen algunas razones que quizás resulten obvias para explicar por qué los amigos son buenos para nuestra salud: nos escuchan y ofrecen un hombro donde llorar para desahogarnos, actúan como una caja de resonancia de ideas y consejos que ninguno de los dos hubiera podido considerar y son una excelente compañía para pasar momentos agradables.
“No existe nada más preciado en la Tierra que la amistad verdadera”.
Tomás de Aquino
Pero la amistad tiene beneficios que van más allá de lo social. Por una parte, investigaciones muestran que tener fuertes vínculos sociales está relacionado con la disminución de la mortalidad.
Pero cuando se trata de salud cerebral, los amigos ayudan a preservar nuestros recuerdos y destreza a medida que envejecemos, mientras que el aislamiento puede ser un factor clave para el deterioro cognitivo en ancianos.
Estas son algunas razones por las cuales la amistad es buena para tu cerebro:
1. Te ayudan a enfrentar desafíos
En un estudio encabezado por el profesor Dennis Proffit, psicólogo de la Universidad de Virginia, se le pidió a 34 estudiantes que se pararan en la base de una colina empinada y calcularan su inclinación. Quienes completaban la tarea en compañía de sus amigos estimaron que la colina no era tan empinada, mientras que quienes lo hacían solos estimaron que la colina tenia una inclinación más pronunciada.
Esto demuestra que el apoyo social puede cambiar la percepción que tenemos sobre un problema. Con amigos cerca, los desafíos no parecen ser tan difíciles. Al superar los obstáculos, fomentamos nuestro autodesarrollo y fortalecemos nuestra resiliencia. Las tareas difíciles no lo son tanto cuando tenemos amigos a nuestro lado.
2. Vives más tiempo
Como se mencionó anteriormente, las amistades están asociadas con la longevidad. Un estudio realizado en Australia encontró que las personas con grupos sólidos de amistades tenían un 22% más de probabilidad de vivir más que las personas que no tenían amigos duraderos. Sorprendentemente, los investigadores también encontraron que la familia y los hijos tienen menor influencia en la longevidad del participante.
Expertos han propuesto que llevar una vida intelectualmente estimulante puede fomentar nuestra vitalidad cognitiva. Los amigos a menudo tienen intereses en común con nosotros, por lo que estimulan el pensamiento y el análisis, lo que ayuda a mantener nuestro cerebro activo.
Y cuando estás enfermo, los amigos son aún más importantes. En un estudio realizado en casi 3 mil enfermeras con cáncer de mama, las que tenían amigos cercanos tuvieron una tasa de mortalidad por su enfermedad casi cuatro veces menor que las que no tenían amigos cercanos. La proximidad y la cantidad de contacto que las participantes tuvieron con sus amigos no asoció con la supervivencia, pero sí lo hizo el hecho de saber que estaban allí.
Este hallazgo enfatiza la importancia de la mentalidad: la supervivencia está fuertemente influenciada por el deseo de vivir. Los amigos pueden ayudarnos a mantener una actitud positiva.
3. Ayudan a mantenerte en forma
El ejercicio es altamente beneficioso para el cerebro. Según el profesor Tomporowski de la Universidad de Georgia, hacer ejercicio durante al menos 20 minutos facilita el procesamiento de la información y las funciones de la memoria.
Además, si tienes amigos que les gusta mantenerse en forma, es más probable que tú también lo hagas. En 2007, los profesores Nicholas Christakis y James Fowler publicaron un estudio que reveló que existe un 60% más de riesgo de que las personas se vuelvan obesas si sus amigos también sufren de un sobrepeso severo.
Por lo tanto, si tus amigos siguen un estilo de vida saludable, haciendo ejercicio y alimentándose sanamente, es probable que sus buenos hábitos se contagien. Hacer planes como ejercitarse juntos o compartirse consejos de nutrición puede ayudar a mejorar tu calidad de vida, y por ende, mejorar tu cognición, disminuir el riesgo de desarrollar problemas de salud mental, entre otros beneficios.
4. Ayudan a relajarnos
Hoy en día, la vida moderna es muy agitada. Los amigos nos ayudan a sentirnos tranquilos y a relajarnos, lo que beneficia nuestra salud cerebral y el cumplimiento de nuestros objetivos profesionales.
Un estudio realizado en Suecia evaluó los niveles de estrés de 13,395 empleados y descubrió que las conexiones sociales fuertes actuaban como un amortiguador contra futuras afectaciones cognitivas, que incluían problemas de concentración, memoria, toma de decisiones y pensamiento reflexivo.
Los amigos nos ayudan a protegernos del insomnio y el agotamiento, dándonos tiempo libre de nuestra vida profesional para reequilibrarnos y ‘recargar baterías’.
A menudo nos enfocamos en encontrar la pareja perfecta y criar a los mejores hijos, pero la investigación muestra que nuestros cerebros también se benefician de tener amistades fuertes.
Al respecto, Karen Roberto, profesora de la Universidad Tecnológica de Virginia dijo que la amistad es un recurso infravalorado, y que el mensaje que nos dan los estudios sobre el tema es que los amigos mejoran tu vida.
Vía Neuronation