Enseñarle a tus hijos a donar los hará financieramente más inteligentes
Cuando se trata de inteligencia financiera, por lo general pensamos que enseñarles a los niños cómo presupuestar y ahorrar los preparará para alcanzar mayores éxitos en la vida. Sin embargo, una nueva investigación sugiere que enseñar a nuestros hijos a donar parte de su dinero los prepara para tomar mejores decisiones.
“Cuando le enseñas a tus hijos sobre las donaciones a la caridad, les enseñas a reservar una parte de su dinero para los demás, lo que les muestra que pueden dividir su dinero para diferentes propósitos”, menciona Leslie H. Tayne, abogada financiera y autora del libro Life & Debt.
Tayne menciona que las donaciones son la base del presupuesto, y que esto finalmente se traduce en comprender la idea general de crear apartados de dinero para ahorrar, pagar deudas, abonar a un fondo de retiro y muchas otras áreas para reservar el dinero a futuro.
Dicho estudio también revela que la generosidad puede hacer a tus hijos más felices y saludables a largo plazo. «Donar ayuda a darles a los niños una sensación de empoderamiento y les enseña que incluso sus pequeños esfuerzos pueden marcar la diferencia, pues a menudo los sentimientos positivos relacionados con la entrega de dinero los llevarán a querer ayudar más, y en distintas formas que no solo tienen que ver con dinero».
Sobre el tema, estas son tres formas de introducir a tus hijos en el concepto de donar a la caridad:
Empieza con algo pequeño: Cada vez que tus hijos reciban dinero, puedes sugerirles una pequeña cantidad para regalar. Por ejemplo, si reciben $100 pesos, podrían destinar al menos $20 a personas necesitadas o refugios de animales. Y a medida que crezcan, puedes conversar con ellos acerca de la cantidad que ellos consideran importante donar. Guardar monedas o destinar una “alcancía de donaciones”, o cualquier representación visual, también puede ayudarles a entender el concepto.
Encuentra una causa significativa: Ayúdales a encontrar algo que les apasione. Por ejemplo, si aman los deportes, pueden encontrar una opción, grupo o asociación para donar a niños que necesiten practicarlos. También puedes mencionarles algunos motivos por los que has donado y explícales por qué fue importante para ti. De esta manera, podrás inspirar a tus hijos y seguirán tu ejemplo. Si puedes, considera ofrecerte como voluntario o visitar directamente una organización para que tu hijo pueda ver de primera mano de qué manera su donación ayuda a los demás.
Consejos por edades:
3 a 5 años: Aunque probablemente no sean lo suficientemente grandes para tener dinero propio, puedes comenzar hablando con tus niños acerca de la caridad y lo qué significa para ti y para ellos.
6 a 12 años: Una vez que los niños comiencen a recibir dinero, ya sea por sus cumpleaños, por méritos o por otros motivos, anímalos a reservar una porción de este para donarlo. Leslie Tayne menciona que a esta edad, los niños comienzan a tener una mejor comprensión acerca de la idea de retribuir y de que hay otras personas que tienen menos que ellos.
13 a 18 años: Cuando los adolescentes tienen sus primeros trabajos, sugiéreles aumentar sus contribuciones caritativas en función de un porcentaje determinado de lo que están obteniendo. Si bien, se encuentran en una edad donde pueden llegar a ser egoístas, todavía tienen la capacidad de ser compasivos y empáticos. Donar refuerza esas emociones, lo que los llevará muy lejos en la vida.
Vía Web MD