La personalidad de los perros cambia con la edad, revela estudio
Todos los dueños y amantes de los perros saben que sus mascotas no son las mismas en su vejez que cuando eran cachorros, pero a menudo no terminan por identificar los cambios exactos de personalidad provocados con el paso del tiempo.
Pero ahora, un nuevo estudio revela que algunos rasgos de la personalidad de los perros, como la atracción por experiencias nuevas, el deseo de explorar y la necesidad de correr, parecen cambiar con la edad.
De acuerdo con lo revelado por la Universidad Eötvös Loránd en Budapest, Hungría, la personalidad de los perros es estable pero maleable. Mientras que los perros son activos y curiosos cuando son jóvenes, con el paso del tiempo esta curiosidad y energía disminuye a medida que envejecen.
Para estudiar cómo las personalidades de los perros pueden cambiar con el tiempo, los investigadores reclutaron a 217 border collies. Las edades de los perros al comienzo del estudio eran de 6 meses a 15 años.
Tras ser evaluados con una serie de pruebas de personalidad, cuatro años más tarde los investigadores invitaron a los perros que aún vivían, junto con sus dueños, a laboratorios para volver a realizar las mismas pruebas.
Algunas de las pruebas realizadas fueron: prueba de exploración, frustración, de objeto nuevo, juego de pelota, de obediencia y de resolución de problemas.
Cuando los investigadores compararon a los perros, encontraron que los más activos y curiosos en la primera prueba seguían siendo los más activos y curiosos cuatro años después al momento de estar con otros perros, pero que individualmente eran menos activos y curiosos de lo que habían sido.
En general, los investigadores encontraron que la atención y la capacidad de los perros para resolver problemas cambiaron mucho con el paso del tiempo, mejorando hasta aproximadamente los 6 años de edad y luego permaneciendo estables. El rasgo de exploración no cambió mucho en los primeros años de vida, pero luego, cuando los perros tenían 3 años, su curiosidad por objetos y situaciones novedosas comenzó a disminuir.
La capacidad de los perros para tolerar la frustración siguió siendo la misma durante todas sus vidas, al igual que su deseo de socializar. Pero sus niveles de actividad disminuyeron continuamente a medida que envejecían.
El estudio completo fue publicado el pasado miércoles en la revista científica Scientific Reports y puedes consultarlo aquí: www.nature.com/articles/s41598-020-74310-7
Con información de NBC