¿Cómo ser un líder ético? 5 acciones clave para lograrlo
Muchos líderes no consideran qué es lo que observan sus empleados, y qué aprenden de ello. Pero los líderes son, por definición, modelos a seguir, y los empleados asumen que su comportamiento es aceptable. El liderazgo ético no es fácil, ni puede ser desglosado en pasos simples. Sin embargo, existen cinco comportamientos clave que todos los líderes éticos deben demostrar:
1. Dirige con el ejemplo
La frase «dirige con el ejemplo» podría escucharse sobreutilizada, pero es verdad. Si quieres ser un líder ético, comienza con una autorreflexión. ¿Cuáles son los comportamientos y atributos de los demás que te mantienen despierto por la noche? ¿Eres propenso a los mismos comportamientos? ¿Cómo tomas decisiones? ¿Te enfocas principalmente en el bien común o en lo que te servirá personalmente?
Su conducta es un mensaje claro para su organización. Los empleados emularán lo que haces, no lo que dices.
2. Desarrolla la conciencia externa
La conciencia externa es la capacidad de pensar más allá de nuestro universo personal, de pensar en lo que hacemos y cómo afecta a otras personas y a la sociedad en general. La Declaración sobre el Propósito de una Corporación, publicada por Business Roundtable en agosto de 2019, definió cinco compromisos al respecto: entregar valor a nuestros clientes, invertir en nuestros empleados, tratar de manera justa y ética a nuestros proveedores, apoyar a las comunidades en las que trabajamos, y generar valor a largo plazo para los accionistas. Tal enfoque establece una base ética poderosa para cualquier líder.
3. Pon a los demás primero
El liderazgo ético pone a los demás primero. Un excelente libro sobre este tema es «Leaders Eat Last: Why Some Teams Pull Together and Others Don’t», de Simon Sinek. En él, destaca la siguiente frase: «Puedes juzgar fácilmente el carácter de cualquier hombre por cómo trata a aquellos que no pueden hacer nada por él». Piensa en tus propias relaciones y en el por qué las cultivas. ¿Es por lo que pueden hacer por ti o por quiénes son? O mejor aún, ¿qué tipo de persona te inspiran a ser?
Se ha demostrado que los empleados respetan a los jefes que pueden admitir sus fallas y no los pasan por alto. Aprecian a los líderes que son transparentes y no temen reconocer sus defectos.
4. Hazte responsable
Los líderes éticos trazan una línea con respecto a su propio comportamiento y el comportamiento de los demás. No señalan con el dedo. No culpan a otros por sus propios errores y están dispuestos a admitir cuando están equivocados. No puedes esperar obtener la responsabilidad de los demás si no estás dispuesto a imponerla a tú mismo.
5. Deja que tus valores sean tu guía
Los líderes éticos no evaden responsabilidades cuando se trata de los valores de la empresa o decisiones morales. Son consistentes y predecibles cuando se trata de tales decisiones. No toman el camino fácil y doblegan sus estándares éticos por conveniencia. Reflexionan sobre estos valores cuando se enfrentan a decisiones difíciles. Claro, muchas de las cosas en este complejo mundo son grises, pero honrar y respetar a los demás, y mostrar tu integridad no lo son. Lo haces o no lo haces.
Si deseas construir un negocio ético, el consejo es simple. Moldea el camino. Habla a menudo sobre tus valores y ponlos a la vanguardia en la toma de decisiones. Comparte tus pensamientos. Y sobre todo, contrata líderes con ideas afines. No inventes excusas para alguien que no es ético, pero que aporta buenos números. Los números serán olvidados. Cómo se ganaron nunca lo será.
Con información de Forbes Council