3 formas sencillas de mejorar la memoria, respaldadas por la neurociencia
Un día viene a ti una gran idea, brillante, de aquellas que sabes que tiene un enorme potencial de convertirse en algo más: en un negocio, un artículo, una canción, un nuevo dispositivo tecnológico, una nueva receta de cocina o cualquier cosa. Pero cuando estás a punto de escribirla, la olvidas.
Aunque es poco probable que algo que no podemos recordar durante más de unas cuantas horas sea tan importante, aún así todos hemos tenido cosas que queremos recordar, pero nuestra memoria no nos lo permite.
Esto es un problema, porque en lo que respecta al éxito, lo que sabes y lo que realmente haces con ese conocimiento puede marcar la diferencia.
Entonces, ¿qué debes hacer si necesitas recordar algo importante? La mayoría de las técnicas para mejorar la memoria implican una gran cantidad de esfuerzo.
Pero para ello, la ciencia viene al rescate. Tan solo echa un vistazo a las siguientes técnicas para aumentar nuestra memoria a corto plazo.
Predice si recordarás lo que deseas recordar
Un estudio publicado en 2011 en el Canadian Journal of Experimental Psychology mostró que el simple hecho de preguntarnos si seremos capaces de recordar algo mejora significativamente las probabilidades de que sí lo hagamos, en algunos casos hasta en un 50% más.
Esto es especialmente efectivo para recordar cosas que queremos hacer. A esto se le conoce como ‘memoria prospectiva’ y es una forma de memoria que implica recordar realizar una acción planificada o recordar una intención planificada.
No está claro por qué predecir si recordaremos algo funciona. Quizás está relacionado con que el acto de predecir es probarnos un poco a nosotros mismos. La investigación muestra que autoevaluarnos es una forma extremadamente eficaz de acelerar el proceso de aprendizaje.
Dilo en voz alta
Todos, en algún momento de nuestra vida, nos hemos topado con personas que repiten en voz alta las cosas que están aprendiendo. Quizás nosotros mismos lo hemos hecho.
Un estudio publicado en 2010 en el Journal of Experimental Psychology encontró que decir palabras en voz alta, o simplemente pronunciarlas, las hace más distintivas. Las separa de todas las otras palabras que estás pensando. Las hace diferentes.
Pronunciar las frases y todo el aprendizaje hace que esto sea más memorable.
Ensaya durante 40 segundos
La consolidación de la memoria es el proceso en el que los recuerdos temporales se transforman en recuerdos más estables y duraderos. Aunque el proceso de consolidación de la memoria puede acelerarse, almacenar un recuerdo de forma duradera lleva tiempo.
Una forma de aumentar las probabilidades es ensayar lo que quieras recordar durante 40 segundos. Un estudio de 2015 publicado en el Journal of Neuroscience encontró que un breve ensayo, como recordar un evento en tu mente, repasar lo que alguien dijo en una reunión o trazar mentalmente una serie de pasos, hace más probable que recuerdes lo que ensayaste.
Como escriben los investigadores, ese “breve período de ensayo tiene un efecto enorme en nuestra capacidad para recordar eventos complejos y realistas durante períodos de una a dos semanas. También hemos relacionado este efecto de ensayo con el procesamiento en una parte particular del cerebro: el cíngulo posterior”.
Vía INC