¿No puedes dormir? Concilia el sueño en dos minutos con este sencillo truco
El estrés, la alimentación y la exposición a la luz azul de pantallas de smartphones, computadoras y tablets, son algunos de los factores que pueden ocasionar insomnio, un padecimiento que afecta aproximadamente al 40% de la población en el mundo.
Sin embargo, conciliar el sueño rápidamente es posible al practicar este sencillo método desarrollado por la Marina de Estados Unidos. Se le conoce como “El Método Militar”.
De acuerdo con Sharon Ackerman, autora del libro ‘Relájate y gana: Rendimiento de Campeonato’, este método se creó para ayudar a los pilotos militares a dormir en cuestión de minutos y así evitar que tomaran malas decisiones debido al estrés, la fatiga y el insomnio.
Ackerman explica que los pilotos practicaron durante seis semanas hasta finalmente, el 96% de ellos logró dominar la técnica. Incluso pudieron dormir después de beber café y tener de fondo estrepitosos ruidos de disparos. De hecho, a los pilotos se les enseñó a dormir sentados en una silla, una posición difícil para cualquiera, lo que comprueba la eficacia del método.
Hacerlo es muy fácil. Sigue estos pasos, practica a diario y muy pronto podrás recuperar esas horas de sueño que son tan necesarias para nuestro bienestar.
1. Relaja tu cara: La cara es el epicentro de todas nuestras emociones. Para relajarla, recuéstate y cierra los ojos mientras respiras lenta y profundamente. Relaja todos los músculos de tu cara, desde tu frente, ceño, párpados, mejillas, boca y quijada. Cuando relajas tus músculos, le estás enviando una señal al cerebro de que es hora de dormir.
2. Relaja tus hombros, brazos y torso: Ahora, para reducir la tensión acumulada, relaja completamente tus hombros. Déjalos caer tanto como puedas. Respira hondo. Ahora, comienza a relajar tu brazo dominante. Ya seas diestro o zurdo, concéntrate en liberar la fuerza de tu bícep, después relaja tu antebrazo y finalmente tu mano y dedos. Repite lo mismo con tu otro brazo. Continúa respirando hondo y relaja también tu pecho y después tu espalda baja.
3. Relaja tus piernas: Comienza hundiendo tu muslo derecho como si fuera peso muerto; continúa con la pantorrilla hasta llegar a tu tobillo y pie. Siente como los músculos se relajan cuando tu pierna se hunde. Repite el procedimiento con tu pierna izquierda. En este momento, has logrado relajar cada músculo de tu cuerpo.
4. Despeja tu mente: El último paso es despejar tu mente durante 10 segundos. Esto es sin pensar en absolutamente nada, pues si viene a tu mente un pensamiento, puedes provocar que algunos de tus músculos se contraigan de manera involuntaria. Solo mantén la mente en blanco. Incluso, puedes lograrlo manteniendo una imagen estática en tu mente, como imaginar que estás recostado en una habitación oscura.
Este es un paso complicado pero necesario, y dominarlo te ayudará a calmar de manera voluntaria cualquier pensamiento que ocasione estrés, ansiedad o tristeza.
Vía Healthline y Medium. Foto de Andrea Piacquadio en Pexels.